lunes, 29 de diciembre de 2008

AGUSTIN LOPEZ SOBRINO ANALIZA LA ECONOMIA DEL 2009

Un breve y modesto análisis económico para el año 2009

(A.L.S. para Sentido Común)

El año que comienza en la República Argentina para quienes les toca gobernar y tomar medidas económicas, va a ser un año difícil, incierto y complejo. La administración Kirchner desde el año 2003 contó con un escenario favorable internacional, lo que algunos economistas suelen llamar viento de cola, refiriéndose, por ejemplo, a los altos precios que pagaba el mundo por nuestros comodities, por el alto consumo mundial producto de la bonanza global y el ingreso de 500 millones de personas que pasaron a ser grandes consumidores en el período mencionado, sobre todo habitantes relegados o extremadamente pobres de China, India, etc.; pero varios son los factores que a mi entender influyeron en los precios exorbitantes de nuestros productos agrícolas, en especial las oleaginosas, de las cuales, además del consumo tanto humano como animal, grandes demandas eran destinadas a convertirlos en bio-combustibles. A partir del año 2007, mas o menos, cuando empieza la fenomenal crisis de las hipotecas en Estados Unidos, las que finalmente contagian al mundo, los grandes inversores de Wall Street empezaron a tener demandas o instrucciones de sus clientes, los dueños del capital, en apalancarse o refugiarse en activos, ya no de hipotecas sino de comodities y la vedette fue el petróleo y los alimentos, por esa razón y por los volúmenes extraordinarios que compraban, fueron de igual forma extraordinarios los precios que se llegaron a pagar por los mismos, llegando entonces a casi U$S 150 el barril de petróleo, hoy a menos de U$S 40 y a mas de U$S 600 por tonelada de soja, hoy también a mitad de esos valores. Los motivos son la salida de los inversores por temor a que a raíz de la tremenda expansión a nivel mundial de la crisis surgida en los Estados Unidos y por considerar entonces que esta traería como consecuencia directa la baja del consumo por un lado y por el otro el desaliento de los productores de bio-combustibles por dejar de ser negocio cuando se consigue el petróleo a menos de U$S 40 el barril. De cualquier forma, mientras esto ocurría, Brasil pasó de ser un importador neto de petróleo a un importante exportador del mismo, y las producciones agropecuarias fueron creciendo en calidad y en cantidad y no solamente en semillas o granos sino de productos cárnicos, que vigorosamente ha ganado mercados internacionales y le trajo como consecuencia el crecimiento de sus reservas internacionales y además fijar planes de mediano y largo plazo para sus agricultores e inversiones millonarias en la búsqueda de nuevos yacimientos de petróleo, sin descuidar y hablo por los anuncios que ha hecho el Presidente Ignacio Lula Da Silva, en grandes planes de financiamiento para la industria en general. La política económica local es conocida por cada uno de nosotros y cada uno sacará sus propias conclusiones o reflexiones en cuanto a si son políticas de mediano y largo plazo, de corto plazo o simplemente medidas del día a día. Feliz año

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