Ella 29, él 59: la historia de un amor violento que terminó siendo un crimen
Peleas y episodios de violencia marcaron buena parte de la relación de Rosana Edith Galliano con su esposo 30 años mayor, excluído por la Justicia del hogar que compartían y principal sospechoso del crimen ocurrido en el barrio El Remanso, en el partido de Exaltación de la Cruz. La pareja tenía dos hijos, de 3 y 4 años, que, según se informó, en el momento del asesinato no habrían estado en el lugar del hecho. La tormentosa relación de Galeano -oriunda de Caseros y de 29 años- y su esposo, de 59, llegó a su fin hace un año, cuando la mujer, cansada de ser víctima de violencia familiar, radicó una denuncia contra el hombre en el Juzgado de Paz de Exaltación de la Cruz. Allí, luego de un proceso que culminó a mediados de 2006, la jueza María Elvira Del Valle Núñez Leguizamón excluyó al esposo de la casa en la que vivían en calle Caramba, entre Paso de la Patria y La Zamba. La jueza inclusive restringió el acercamiento del hombre a Galliano, que se quedó viviendo junto a su hermana Mónica, de 34 años, en la casa que estaba también a nombre de su esposo, un comerciantes de productos de granja, más precisamente pollos y huevos. El barrio El Remanso era tranquilo hasta que este episodio sacudió a los vecinos, que veían "casi todos los días" a Rosana caminando 150 metros para ir a comprar al almacén. "Están todos revolucionados porque es un lugar tranquilo. Prácticamente no hay asaltos, sólo tal vez algún ratero que roba en quintas vacías", detalló Victoria, una vecina del barrio. Para los investigadores, las claves de este episodio pasan por tratar de identificar el último número que llamó al celular de la mujer y un sueter que fue hallado en cercanías de la casa, y que habría sido identificado por los familiares de la víctima como perteneciente al ex esposo.
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