CON "HUMILDAD"

"Con humildad" la Presidenta pidió "levantar el paro para dialogar

Durante un acto en Parque Norte, reivindicó las retenciones y minimizó los cacerolazos. Abrió las puertas para una nueva negociación con el campo. Eso sí: siempre y cuando den marcha atrás con los cortes.

Evitó cantar la marcha peronista, se emocionó con el himno, se quitó un saco blanco que la molestaba por el calor, acomodó los micrófonos con las dos manos, y explicó: “El 10 de diciembre les dije que por ser mujer me iba a costar y no me equivocaba, a las mujeres siempre todo nos ha costado más, pero también somos las mujeres las que jamás abandonamos nuestro puesto de lucha”. Así comenzó Cristina Kirchner su segundo discurso de la semana referido al conflicto del campo. Al contrario de su exposición del martes 25, en la Casa Rosada, que provocó cacerolazos en distintos puntos del país, la Presidenta esta vez intentó mostrarse más conciliadora y convocó a los dirigentes rurales al diálogo, eso sí, siempre y cuando “levanten la medida en contra del pueblo”. A pesar de las especulaciones, no anunció ningún tipo de medidas hacia el sector.Arriba del escenario de Parque Norte la acompañaban su esposo, el ex presidente Néstor Kirchner; los ministros de su Gabinete, incluso el de Economía, Martín Lousteau, el principal enemigo de los dirigentes rurales; la mayoría de los gobernadores oficialistas; intendentes bonaerenses; legisladores; Estela Carlotto, titular de las Abuelas de Plaza de Mayo; dirigentes de la juventud peronista y sindicalistas.Cristina había llegado desde la Quinta de Olivos acompañada por Alberto Fernández, el jefe de Gabinete. Fue allí donde repasó los principales puntos de un discurso en el que, a pesar del tono dialoguista, dejó en claro que es inflexible frente a la huelga impulsada por los dirigentes agrarios: “Yo les pido, humildemente, como Presidenta de todos los argentinos y en nombre de todos los argentinos, que levanten el paro para entonces sí dialogar. Humildemente, levanten el paro y vamos a dialogar”.